A pesar de que el agua es un derecho para la humanidad, parece que hoy en día tener acceso a ella es un verdadero lujo, en Guatemala más 3 millones y medio de personas no tienen acceso a agua potable (World Scarcity Clock, 2023) y en su mayoría niños y mujeres son los que dedican entre 2 y 3 horas a recolectar el vital líquido en ríos o tomas más cercanos, actividad que no es una solución viable ya que más del 90% de las fuentes de agua en Guatemala tienen contaminación bacteriológica, que al consumirla o utilizarla para alimentos ocasiona enfermedades que pueden conducir a la muerte.
¿Por qué sucede la crisis del agua en Guatemala?
La crisis del agua en Guatemala y en el resto del mundo es el resultado de una combinación de factores, que incluyen; la deforestación, la contaminación, la sobreexplotación de recursos hídricos, la falta de infraestructura adecuada para el suministro de agua potable y el cambio climático.
- Deforestación: La deforestación desenfrenada en Guatemala ha llevado a la degradación de los ecosistemas acuáticos, reduciendo la capacidad de los suelos para retener agua y aumentando la erosión del suelo, lo que afecta la calidad y cantidad de agua disponible en los ríos y mantos acuíferos.
- Contaminación: La contaminación industrial, agrícola y doméstica ha afectado gravemente la calidad del agua en Guatemala. La falta de sistemas de tratamiento adecuados permite que los desechos industriales, los productos químicos agrícolas y los desechos humanos contaminen los cuerpos de agua, haciéndolos peligrosos y de alto riesgo para el consumo humano.
- Sobreexplotación de recursos hídricos: El uso excesivo y no sostenible de los recursos hídricos, especialmente para la agricultura y la industria, ha agotado los acuíferos subterráneos y ha reducido los caudales de los ríos y arroyos, lo que contribuye a la escasez de agua.
- Falta de infraestructura: Muchas comunidades en Guatemala carecen de acceso a sistemas de agua potable y saneamiento básico. La falta de infraestructura adecuada para la distribución de agua potable y el tratamiento de aguas residuales agrava la crisis del agua y pone en riesgo la salud de las poblaciones más vulnerables.
- Cambio climático: El cambio climático está exacerbando la crisis del agua en Guatemala al aumentar la frecuencia e intensidad de eventos climáticos extremos, como sequías, deslaves e inundaciones. Estos fenómenos afectan la disponibilidad y calidad del agua, así como la capacidad de las comunidades para adaptarse a estos cambios.
Abordar la crisis del agua en Guatemala requiere acciones emergentes y coordinadas a nivel gubernamental, comunitario e internacional para conservar los recursos hídricos, mejorar la infraestructura de agua y saneamiento, promover prácticas agrícolas sostenibles y mitigar los impactos del cambio climático.
Es un desafío complejo que requiere un enfoque integral y coordinado para abordar sus diversas dimensiones. Aquí tienes cinco maneras en que se podría trabajar para poner fin a esta crisis:
5 maneras que pueden ayudar a poner fin a la crisis del agua en Guatemala.
- Mejora de la infraestructura de agua y saneamiento: Invertir en la infraestructura de agua y saneamiento es fundamental para garantizar el acceso a agua potable y condiciones sanitarias adecuadas. Esto puede incluir la construcción y mantenimiento de sistemas de abastecimiento de agua seguros y confiables, así como la expansión de la red de alcantarillado y el acceso a instalaciones de saneamiento adecuadas y sostenibles.
World Vision Guatemala, presentó la historia de Carlitos, un pequeño niño del Corredor Seco, que día a día debía recorrer hasta 2 kilómetros en busca de agua, gracias al proyecto “Llevemos Agua”, las donaciones de iniciativa privada y personas generosas, se construyó un proyecto de agua con un tanque que hoy en día distribuye agua en los hogares del Roblarcito, Chiquimula, un claro ejemplo que la infraestructura de agua, cambia vidas. Vea aquí su historia.
- Gestión sostenible de los recursos hídricos: Promover prácticas de gestión sostenible de los recursos hídricos es crucial para garantizar la disponibilidad continua de agua limpia y segura. Esto puede incluir la protección de fuentes de agua, la promoción de técnicas de conservación del agua y la implementación de regulaciones para prevenir la contaminación de cuerpos de agua.
- Educación y concientización pública: La educación y la concientización pública son fundamentales para promover el uso responsable del agua y fomentar prácticas de higiene adecuadas. Esto puede incluir campañas de sensibilización sobre la importancia del uso responsable y cuidados del agua potable, el tratamiento adecuado de desechos, la conservación y cuidados de las zonas de recarga hídrica.
- Inversión en tecnología y soluciones innovadoras: La inversión en tecnología y soluciones innovadoras contribuye a mejorar el acceso al agua potable en áreas donde la infraestructura tradicional es de mala calidad, insuficiente o costosa de implementar. Implementaciones como tecnologías de purificación de agua de bajo costo con cloro, retretes de filtración, sistemas de recolección de agua de lluvia y tecnologías de bombeo a base de energía solar o mecánicas.
- Fortalecimiento de la gobernanza y participación comunitaria: Fortalecer la gobernanza del agua y promover la participación comunitaria en la toma de decisiones ayuda a garantizar una gestión integral más equitativa y sostenible de los recursos hídricos con enfoques de microcuencas. Esto puede incluir la creación de comités de agua locales, la implementación de mecanismos de participación ciudadana en la planificación y gestión del recurso hídrico, y el fortalecimiento de la capacidad institucional para la gestión del agua a nivel local y nacional.
Estas acciones deben ser implementadas de manera coordinada y sostenible, involucrando a múltiples actores, incluyendo a las comunidades, gobierno, organizaciones no gubernamentales, el sector privado y la sociedad civil.
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