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¿Cómo se relacionan la crisis del agua con el cambio climático?

Escrito por Guatemala | Sep 26, 2024 6:40:34 PM

El cambio climático tiene amplias implicaciones para el medio ambiente, la economía y la sociedad. Puede afectar la disponibilidad de recursos naturales como el agua, los bosques y los alimentos.  El aumento  de riesgo a desastres causados por eventos naturales o antropogénicos amenazan la biodiversidad y provocan la pérdida de hábitats naturales, causando impactos negativos en la salud humana. Por lo tanto, abordar el tema sobre la adaptabilidad al cambio climático se ha convertido en uno de los desafíos más urgentes y críticos que enfrenta la humanidad en el siglo XXI, especialmente en el impacto negativo sobre la escasez del agua.

¿Qué es el cambio climático?

 

Las Naciones Unidas se refiere al cambio climático como los cambios a largo plazo de las temperaturas y los patrones climáticos.  Estos cambios pueden manifestarse en diversas formas, como el aumento de la temperatura promedio global, cambios en los patrones de precipitación, aumento del nivel del mar, derretimiento de los casquetes polares y glaciares, y aumento en la frecuencia e intensidad de eventos climáticos extremos como tormentas, sequías e inundaciones.

 

 

¿Cómo afecta el cambio climático al agua?

 

Las Naciones Unidas indica que a nivel mundial 2200 millones de personas carecen de agua potable y 4200 millones, el 55%, carecen de un sistema de saneamiento adecuado, el panorama no es alentador, ya que el cambio climático afectará la accesibilidad, calidad y cantidad del agua necesarias para el consumo humano, el saneamiento básico, la agricultura y alimentación de las personas, incrementado las estadísticas alrededor del mundo.

 

“Según las previsiones científicas, la emergencia climática provocará una variabilidad o modificación de los recursos hídricos. Esto provocará que los episodios de sequía en regiones ya áridas, sean más frecuentes y duraderos en el tiempo”.

 

La crisis del agua y el cambio climático están estrechamente relacionados debido a varios factores interconectados:

 

  1. Escasez de agua: El cambio climático puede alterar los patrones de precipitación, lo que puede llevar a sequías más frecuentes, prolongadas o intensas en algunas regiones. Esto puede resultar en una escasez de agua, ya que los suministros de agua dulce se ven comprometidos.
  2. Aumento del estrés hídrico: El cambio climático puede aumentar la demanda de agua debido al aumento de la temperatura y la mayor necesidad de riego en la agricultura. Esto puede aumentar el estrés hídrico en áreas que ya están experimentando una escasez de agua, exacerbando la crisis del agua.
  3. Desafíos en la gestión del agua: Las variaciones climáticas pueden hacer que la gestión del agua sea más compleja. Las infraestructuras diseñadas para manejar ciertos patrones climáticos pueden volverse inadecuadas frente a condiciones climáticas cambiantes, lo que dificulta la gestión eficiente del recurso hídrico.
  4. Calidad del agua: El cambio climático también puede afectar la calidad del agua. Las lluvias extremas pueden llevar a la escorrentía de contaminantes hacia fuentes de agua, aumentando la contaminación. Además, la elevación de temperaturas puede contribuir a la proliferación de algas nocivas en cuerpos de agua, lo que afecta tanto la calidad como la seguridad del suministro de agua.
  5. Impacto en los ecosistemas acuáticos: Los cambios en los patrones de temperatura y precipitación pueden afectar los ecosistemas acuáticos, como los ríos, fuentes o nacimientos, lagos y humedales. Esto puede provocar la pérdida de hábitats acuáticos, la disminución de la biodiversidad y la interrupción de los ciclos naturales del agua.

 

Como pudimos leer, la relación entre la crisis del agua y el cambio climático es bidireccional:

El cambio climático agrava la crisis del agua al afectar los patrones de precipitación y aumentar la frecuencia e intensidad de los eventos climáticos extremos, como sequías, deslaves e inundaciones.

A su vez, la gestión inadecuada del agua y la contaminación contribuyen al cambio climático al liberar gases de efecto invernadero en la atmósfera, como el metano producido por la descomposición anaeróbica de materia orgánica en humedales y cuerpos de agua contaminados.


Enfrentar estos desafíos requiere medidas urgentes a nivel local, nacional y global, que incluya la conservación y gestión sostenible de los recursos hídricos, la mitigación de las emisiones de gases de efecto invernadero y la adaptación a los impactos inevitables del cambio climático. Sin embargo, tú también puedes ayudar, empezando a tomar conciencia del uso adecuado y sostenible del agua en el hogar, la oficina y demás lugares.