Guatemala está siendo testigo de una revolución silenciosa, una que busca transformar la vida de 1000 niñas a través de la educación y el apoyo constante. La historia de Olguita es una entre esas mil, pero su impacto es incalculable.
.png?width=1280&height=720&name=MicrosoftTeams-image%20(77).png)
Gracias a la campaña 1000 niñas de World Vision, Olguita pudo seguir sus estudios y romper con el ciclo de trabajo en el campo que enfrentan muchas jóvenes de su edad en su comunidad. Es una ventana a un mundo de oportunidades: ella sueña con las matemáticas, con la comunicación y, sobre todo, con ayudar a su comunidad siendo maestra o enfermera.
Descubre: ¿La educación puede ayudar a erradicar la pobreza en Guatemala?
Pero el camino no es fácil. En su comunidad, el acceso al agua potable es limitado, lo que conduce a enfermedades y desafíos de salud. Sin embargo, con la determinación de Olguita y el apoyo de World Vision, se está luchando por un cambio.
Mariela, gestora de proyectos de la organización, refleja el compromiso de World Vision al trabajar junto a líderes comunitarios para abordar problemas como la desnutrición y la falta de higiene. El acceso al agua potable y la educación son dos pilares fundamentales en esta lucha.
Puedes leer: Agua potable en Guatemala, un derecho de niñas, niños y adolescentes
La campaña 1000 niñas no se trata solo de números. Se trata de historias reales, de sueños, esperanzas y, sobre todo, de cambio. Es una iniciativa que busca el empoderamiento femenino de jóvenes como Olguita para que puedan transformar sus comunidades desde adentro.
Únete a World Vision en esta lucha. Porque cada niña cuenta, y juntos podemos hacer la diferencia en la vida de 1000 niñas en Guatemala. Si aún no sabes cómo, ingresa a nuestra página de #1000Niñas y dona por una niña.
